El 5G comenzará enfocado a sectores concretos con demanda de nuevos servicios

El 5G comenzará enfocado a sectores concretos con demanda de nuevos servicios

Aotec asiste a las jornadas del COIT sobre esta nueva tecnología de conectividad, que se enfrenta al reto de la brecha digital

La ‘killer application’, la aplicación clave que hará explosionar el 5G aún no se conoce. La tecnología está madurando a gran ritmo mientras que sus usos aún están en pañales… y son esenciales para que las empresas puedan ‘monetizar’ las fortísimas inversiones del despliegue. Por eso se lanzará enfocado a sectores concretos cuyas necesidades técnicas no pueda cubrir el 4G, al que aún le queda recorrido, y se explora la llamada industria 4.0, el vehículo conectado, la energía, el retail o la sanidad.

El presidente de AOTEC, Antonio García Vidal, acudió a la jornada organizada por el COIT y el Instituto Cerdá en Madrid, en la que se puso de manifiesto que uno de los grandes retos en esta nueva tecnología será lograr la coherencia en el territorio y evitar la brecha digital.

Vidal intercambió opiniones con diversos cargos públicos como el responsable del Observatorio 5G, Federico Ruiz,  o el director general de Telecomunicaciones de Castilla La Mancha, Alipio García; la consejera de Innovación, Ciencia, Universidades y Sociedad Digital de la comunidad Valenciana, Carolina Pascual y su director general para el Avance de la Sociedad Digital, Pedro Pernías; además de miembros del COIT como su director de Relaciones Institucionales, Adrián Nogales.

El representante de los operadores locales de teleco se ha mostrado preocupado porque el 5G surja como ‘burbujas’ aisladas que privilegien unas zonas sobre otras, y señala que los operadores locales son aliados para un rápido despliegue de la nueva tecnología mediante el uso compartido del espectro. 

Precisamente, se presentó un estudio del Instituto Cerdá (link) en el que se apunta la brecha digital como un riesgo que hay que afrontar con medidas específicas por parte del Estado en colaboración con el sector privado “para asegurar la equidad de los ciudadanos en el acceso a los servicios y la dinamización de los territorios con menor demanda, como los rurales y periurbanos”.

Compartición de red y operador neutro

El informe también aboga porque desde el Estado se fomente la coinversión como fórmula para reducir el impacto de la creación de infraestructuras, que implicará inversiones superiores a los 300.000 millones de euros. Asimismo, plantea “flexibilizar las reglas de competencia en aquellas nuevas redes en las que participen varios operadores”.

El estudio, presentado por Lluis Inglada, refleja que los operadores de telecomunicaciones abogan por la compartición de las redes, donde ya tienen experiencia y se están alcanzando acuerdos, los de red plantean la posibilidad de que exista un operador neutro. Concluye que “la Administración debe plantearse exigir acuerdos de compartición como medio de eficiencia en la implantación territorial” y que los operadores neutros “pueden ser los posibles líderes del modelo de gestión multioperador”.  

En cualquier caso, el 5G va a necesitar una infraestructura respaldada por fibra, con grandes torres y con small cells en la última milla que sitúen la emisión cerca de los dispositivos usuarios. Desde Cellnex su responsable de Operaciones Rosendo Urbán señala que en la actualidad trabajan para crear emplazamientos autosostenibles para las macrocells en torres, con uso de energías renovables complementada con baterías y donde además se incorpore un centro de edge computing (acercar la computación al usuario será imprescindible para los tiempos de respuesta).

El dimensionamiento de la red se está haciendo pensando en el tráfico de datos y en especial en la conexión entre dispositivos, que se multiplica exponencialmente cada año y que será imprescindible para que un coche nos advierta de un peligro inminente cuando aún no hemos vuelto la esquina de la calle.

En cuanto a los tiempos de desarrollo, el representante de Ericsson, Guillermo Quintana, señaló que a nivel global en el año 2024 el 35% del trafico móvil será por 5G, una cifra que en Estados Unidos y la Unión Europea se elevará en torno al 50%. Lo cierto es que todos coinciden en que si bien habrá un acelerón en el 5G de aquí a 2025, los usos son los que marcarán la pauta.

Usos por descubrir

¿Qué quiere decir esto? Pues que si la rentabilidad del 5G se encontrara en su aplicación en la agricultura estaría antes cubierta Castilla La Mancha o la huerta murciana que una ciudad… aunque la realidad es que esto se asemeja complicado y se habla más de aplicaciones en la industria convencional, en espacios cerrados donde las redes 5G serán más fáciles de crear, y en sectores como la energía o el transporte, donde empresas como SEAT están dando pasos.

Según el último informe de Ericsson ‘5G businesss potential’ los beneficios de los operadores por los servicios actuales sólo se incrementarán un 1,5% hasta 2026, mientras que en la digitalización industrial crecerán un 13,6%. Estiman que el 36% de este crecimiento se deberá al 5G.

Desde el ayuntamiento de Barcelona Jordi Cirera señala que el 5G tendrá un papel esencial para la seguridad pública y el vehículo conectado, añadiendo que a su juicio la realidad aumentada “casi seguro” que será otro gran vector de desarrollo.

Retos

En cuanto a la ciberseguridad, uno de los asuntos que preocupan a todos los actores, incluída la ciudadanía, desde Ericcson Guillermo Quintana aseguró que en la actualidad los dispositivos incorporan medidas y  que “no debe ser el principal foco porque probablemente son más vulnerables otras redes”.

El panorama es incierto aún en muchos aspectos…. Pero en opinión de Ruíz, hay lecciones que ya se pueden aprender: de Asia, donde han impulsado la tecnología de la mano de campeones locales, y de USA aprender de que dejan espacio para la creatividad, en referencia a mantener una ‘sand box’, dejando espacio físico y en las frecuencias para poder seguir experimentando con el uso del espectro. Por el momento, el Gobierno está reordenando frecuencias y financiando proyectos piloto, según explicó el director general de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información de la Secretaría para el Avance Digital (SEAD), Roberto Sánchez.

En las jornadas también se abordaron otros retos como el problema de mantener la neutralidad de la Red en una tecnología caracterizada por la posibilidad de crear redes virtuales, así como el de los despliegues en la última milla con la implantación de miles de small cells, algo que preocupa especialmente a los ayuntamientos y que necesitará cambios normativos para hacerlo posible.

Mirando a largo plazo la evolución del 5G, el representante de Cellnex, Rosendo Urbán, se mostró convencido de que “todas las bandas migrarán en un futuro a 5G”, incluida la voz, que ahora va en 3G o 2G.

Palancas y frenos

Respecto a las palancas que pueden acelerar o frenar el 5G, el subdirector de Operadores de Telecomunicaciones del Gobierno, Pedro Alonso, señaló la necesidad de “capacitar los recursos humanos a todos los niveles, individual y de empresa”, dado que en España hay un 50% de analfabetismo digital. Un reto que “se impulsará desde el Gobierno pero que implica también a comunidades autónomas y ayuntamientos”.

Por su parte, el informe del Institut Cerdá señala como impulsores de la nueva conectividad la elevada penetración de fibra óptica en España, que favorece la llegada de la nueva tecnología; la alineación entre administraciones, la colaboración entre agentes, que las industrias tengan un papel activo a la hora de detectar casos de uso y la necesidad de contar con 5G como factor de competitividad.

Por el contrario, ejercen como barreras la desinformación, la falta de madurez de algunas soluciones para neutralidad de red, la densificación del entorno urbano, incertidumbres administrativas y el que se garanticen la seguridad de la red y privacidad de los datos.