03 Ago Áurea Telecom, el operador gallego surgido de la red eléctrica
La red eléctrica en España se creó permitiendo la aparición de pequeñas empresas para llegar a las zonas rurales más recónditas. Muchas de ellas fueron adquiridas con el tiempo por las grandes empresas distribuidoras, pero algunas todavía perviven. E incluso han permitido desplegar a operadores de telecomunicaciones sus modernas redes de fibra óptica FTTH. Esta es, precisamente, la historia de Áurea Telecom, que además, está marcada por el carácter de dos mujeres, bisabuela y nieta.
Hay que remontarse a principios de siglo pasado, concretamente a 1906. Y a una mujer con visión y capacidad: Clotilde Fernández. Ella se encontraba al frente de la empresa familiar, unos molinos de harina movidos por la fuerza del agua en el municipio pontevedrés de Ponte Caldelas (Puentecaldelas).
Comenzó a ver que a las ciudades llegaba la electricidad y averiguó cuál era el proceso para generarla. Como la empresa tenía siete molinos de harina, eliminó tres y en su lugar instaló una turbina de corriente continua de unos 3kW. Durante el día servían para un pequeño aserradero de madera y por la noche, ejercía como una pequeña central eléctrica que permitía encender algunas bombillas. De ahí que se llamase inicialmente “fábrica de luz”.
Un tiempo más tarde, las viviendas colindantes a la parcela de la fábrica solicitaron disponer de ese servicio de electricidad, creándose de esta manera una pequeña red de distribución. Inicialmente en corriente continua, y más tarde, se instalaría un alternador en la salida de la turbina. La red se fue extendiendo lentamente por el municipio. Nacía así Eléctrica Los Molinos, empresa distribuidora.
Oportunidad de negocio
Tres generaciones más tarde, los propietarios descendientes de la compañía eléctrica se plantearon. ¿Por qué no llevar fibra óptica a los vecinos igual que hace más de un siglo llevaron la luz? Era el año 2015 y en Ponte Caldeas la conectividad de banda ancha era sólo un sueño.
Tras realizar acuerdos con diferentes compañías eléctricas, proveedores mayoristas y la instalación de cabeceras, en 2017 tenían los primeros clientes. “En aquel entonces R tenía un proyecto de despliegue que no ejecutaba y cuando nosotros lo hicimos, desplegó. Hoy tenemos a Telefónica también, y con ella, a todos los demás”, señala Beatriz Estévez, la biznieta de ‘mamá Clotilde’ y CEO de Áurea Telecom.
La seña de identidad de Áurea Telecom es clara: llegar donde otros no llegan y que ninguna vivienda de sus municipios se quede sin conectividad. Eso en una Galicia rural llena de pequeñas aldeas compuestas por viviendas muy dispersas, y con el problema adicional de un suelo rocoso en el que crear zanjas es muy costoso. Todo un reto que este operador logra salvar con empeño y gracias también a la normativa que obliga a las empresas de servicios básicos (carreteras, alumbrado público, eléctricas, gaseoductos, oleoductos…etc.) a facilitar estos despliegues de redes de comunicaciones.
Hasta la última casa
“Este ha sido el primer concello de Galicia en el que la fibra llega a cualquier casa de todas sus poblaciones. Eso supone crear líneas de acometida de 150 metros y hasta 600 para llevar la conectividad a una sola vivienda”.
Tras Ponte Caldeas se han cubierto los polígonos industriales de El Campiño, en el municipio de Pontevedra y el de A Reigosa en la propia Ponte Caldelas. “Había hambre de fibra y fuimos los primeros en llegar”.
“Crecemos de una forma natural hacia la zona rural de Pontevedra”. También se han expandido a Sotomayor y Arcade de Riba, alcanzando así el mar. En esta última población, abriendo incluso tienda, También están presentes en Caldas de Reis, la península de O Morrazo, donde han llegado sobre fibra de la operadora neutra gallega Rede Aberta, y Vilanova de Arousa.
Para realizar los despliegues de fibra óptica también se apoyan en la red de Unión Fenosa, la mayor compañía eléctrica de Galicia. Un convenio extraordinario que no se da con ninguna otra operadora del país. “Saben que conocemos la distribución de electricidad y tenemos a nuestros técnicos formados, conocemos los peligros y las precauciones que hay que tomar. Saben que vamos a cuidar sus líneas, trabajando en sus postes como si fueran nuestros”, explica.
Límite 45‘
No obstante, la prioridad e Aúrea Telecom no se centra en crecer a un ritmo acelerado, sino proporcionar un servicio de calidad a sus clientes. “Somos una empresa familiar de Ponte Caldelas. No queremos ser muy grandes, vamos poco a poco, expandiéndonos de forma natural y consolidando nuestra huella”, explica.
“Queremos ser cercanos y atender bien a los clientes”. Por eso se han impuesto un límite, cubrir aquel territorio que esté a un máximo de 45 minutos de su núcleo central, lo que les permite mantener su nivel de calidad y de reacción ante incidencias.
Mundo de mujeres
Beatriz desembarcó en la empresa familiar cuando el proyecto de balneario en el que trabajaba se vio paralizado en la crisis del 2008. Su padre siempre le había dicho que el de la electricidad era un mundo de hombres, pero se hizo un hueco y cuando surgió la operadora, se puso al frente.
La CEO de Áurea Telecom es consciente de que su equipo está siendo clave para el éxito de la compañía, junto al “sentido común”. “Cuando comenzamos necesitábamos especialistas en el servicio de telecomunicaciones así que recurrimos a une empresa que facilita directivos para ayudar a arrancar proyectos o apoyar su desarrollo”, rememora.
Así llegó Aurelio Louro, el CTO de la empresa, que preveía estar unos meses. “Desde el principio creyó en el proyecto”, y se convertiría en una de las piezas angulares del equipo junto a Carmen Peón, que encabeza la administración de la operadora, y un equipo formado principalmente por mujeres. “Tenemos un equipo muy sólido, estoy muy orgullosa”, asegura Beatriz Estévez.
En la actualidad han emprendido iniciativas orientadas a empresas como la ciberseguridad con la revisión de los flujos de entrada o las copias de seguridad en sus servidores cloud, además de proporcionar centralitas virtuales y otros servicios.
Áurea pertenece al grupo familiar Enermol, que hasta 2015 estaba centrado en la distribución y producción de energía eléctrica. Es una compañía de telecomunicaciones 100% de capital gallego que ahora también quiere ser 100% verde usando la energía renovable procedente de acuerdos con productoras de energías renovables.